Hubo un tiempo en el que mi casa olía a inciensos y llamas de velas derretidas. Ahora, cuando llego a casa, siento olores a ronroneo que reclaman muchas horas de abandono. Ambos olores se sienten como abrazos que contienen. A veces también me abrazan olores del hermoso varón de hermosos ojos (en mi ropa y en mi piel), pero no son los olores de mi hogar, otros olores son que contienen otras substancias de mi ser.
lunes, abril 26, 2010
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2 comentarios:
Los olores, siempre mportantes en uestras vidas, provocando recuerdos, despertando emociones, sentimientos ya casi olvidados, sensaciones.
Basta percibir tenuemente un olor y nuestra memoria se pone en marcha.
Podría decirte que el olfato es mi sensación preferida, pero cuando recuerdo la emoción que me provoca ver el mar, me rectifico. Somos nuestros sentidos...
Un abrazo
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