Pues yo pretendo torturarlo toda la noche, hacerlo pensar en cuestiones poco urgentes, levantarse y acostarse novecientas noventa y nueve veces, mirar el reloj quinientas, arrugar las sábanas con movimientos histéricos y, en la mañana, hacerlo usar tacones muy altos y mostrarse interesado, lúcido y gentil con la gente durante todo el día... y así, hasta que aprenda.
Pues el mio es testarudo. Si lo obligo a no estar quieto, al otro día me obsequia unos hermosos ojos hinchados...Todo un horror! Aunque lo que más me preocupa es la agresividad que me causa... Ya encontraremos una solución!
Soy lo que puedo ser en este segundo, esto es, dejo de serlo cada vez que pulso una tecla. De algo estoy segura, me duele vivir y sin embargo, amo la vida...
4 comentarios:
Yo lo maté hace mucho, aunque a veces revive, como Peter Sellers en "El Guateque".
Pues yo pretendo torturarlo toda la noche, hacerlo pensar en cuestiones poco urgentes, levantarse y acostarse novecientas noventa y nueve veces, mirar el reloj quinientas, arrugar las sábanas con movimientos histéricos y, en la mañana, hacerlo usar tacones muy altos y mostrarse interesado, lúcido y gentil con la gente durante todo el día... y así, hasta que aprenda.
Yo le obligo a no estar quieto, a leer, a escribir, a no dejerle descansar... y al final se rinde, y me duermo.
Pues el mio es testarudo. Si lo obligo a no estar quieto, al otro día me obsequia unos hermosos ojos hinchados...Todo un horror! Aunque lo que más me preocupa es la agresividad que me causa...
Ya encontraremos una solución!
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